martes, 28 de octubre de 2014

La soledad de los Números del Reloj

El segundero está quieto,
tan estático como siempre,
mientras el reloj alrededor gira,
no deja de girar,
segundo a segundo,
momento a momento,
el uno se acerca, inexorable,
a la posición del segundo,
ahora viene el dos,
de a poco el tres, y así,
instante tras instante,
el ciclo infinito de números
avanza hacia el matadero,
para renacer de nuevo,
mientras el minutero
también avanza en contra,
minuto a minuto,
contra el ciclo de números,
como queriendo detenerle,
conversarle, dar un descanso,
pero no, solo pasa de largo,
un viejo conocido inseguro,
caminando al lado,
mirando de reojo,
que es lo mismo que no mirar.

Doce separados.

El bien que solía ser
es triste ahora,
agotador y nostálgico,
aunque el segundo actual
esté estático esperando.
el presente, al final,
después, quizá,
la espiral, al final.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario