viernes, 18 de enero de 2019

Fruta y comensal

Probar dos veces
la misma fruta,
está prohibido.

Lo quieras o no,
nunca es la misma fruta,
o quizá lo sea,
pero no es el mismo sabor,
cada rincón se ha
puesto al sol o a la sombra,
umbra y penumbra,
y luz,
cada parte es distinta
si pasa el tiempo
algo varía,
algo cambia,
algo es nuevo,
eternamente nuevo
y otra parte es esencial.

Dulce y agraz,
la fruta prueba al comensal,
lo acepta o lo rechaza,
se desarma en su boca
creando la sensación placentera,
o simplemente es un alimento,
soso, irrelevante.

Tanta novedad
en cada encuentro,
en cada palabra,
en cada instante,
en cada silencio.

¿Cómo no quererlo?

Todo tiene tantos prismas,
tantas posibilidades,
y sé que entre nosotros
son infinitas.

Ambos somos,
al mismo tiempo,
fruta y comensal.

miércoles, 2 de enero de 2019

Este momento.

Relaja la mano
y deja que se vayan
las últimas cenizas
de un recuerdo,
los momentos han muerto,
solo fue un intento,
la oportunidad única
de la vida.

No hay repetición
ni segundos momentos,
ocurre en un acto,
ocurre en una acción,
ocurren de una
y ya fue, se acaba.

Pero no es malo,
solo es un poco mejor,
todo se pierde en el intento,
fallé ayer para llegar a esto.

Quizá por eso no debería
dejar correr la lista
y elegir más,
quizá menos.

No sé bien que decir,
prefiero que las cosas
sigan su curso,
todo está en el destino.

Eso es lo bueno,
solo así nos terminamos topando
en la densa vorágine de existir.

Ni los que han vivido más
han develado el secreto,
todo queda al experimento,
yo nunca fui científico,
quizá tú sí puedas.

Mientras mis letras
se vuelven tinta muerta
y te intento decir algo,
que ni yo tengo claro,
estoy perdiendo
lo que quiero darte.

Un mensaje,
aprovecha la oportunidad.