lunes, 15 de agosto de 2022

Desvarío de Invierno

Escucho otra vez al sueño llamándome desde la profundidad de las rimas ocultas entre palabras que jamás pensaron enredarse o emparentada, como el el cuadrado dentro del círculo dentro triángulo, infinitamente unidos en los puntos precisos hasta el final de los tiempos.
Y hay un sueño dentro del sueño, como muñecas rusas, donde siempre alguna de las formas que podría ser yo, mucho más yo de lo que soy ahora, preferiría dormir para siempre, sin despertar en un contrasueño. La polimórfica voz del caleidoscopio me abraza para soltarme al más inmóvil de los mundos dinámicos, donde la línea recta sigue trazada hasta el infinito paralelo al tuyo, en el que jamás nos encontraremos, en el principio no hubo un principio, jamás nos conocimos, pero quisimos hacerlo, bien en el fondo al que jamás le pusiste nombre soy la oportunidad perdida por todas las decisiones que tomaste, el coste de oportunidad. Causa y efecto, los meandros de mi río solo pueden llegar al mar por debajo de la superficie.