viernes, 8 de agosto de 2014

Más Palabras Demás

Necesito escribir
y no perder el tiempo
pasando por tanto borrador,
dejar de sentir el agua fluir
entremedio de mis dedos,
empezar a fluir
por todo mi cuerpo
hasta mis manos,
que no parecen de escritor,
porque no lo soy,
o quizá, tal vez sí,
pero el tema es que mis manos
no lo parecen,
menos lo hace mi letra,
que es una abominación
para la vista sensible
de tantos quejumbrosos,
que estimo más de lo que
parece sano estimar
en una vida de camino
hacia finales poco felices.

Los finales siempre son tristes,
por algo, en algún punto,
para los que no lo armaron,
los que lo llevaron a cabo,
en todo caso,
no se salvan de su maquinación,
la tinta siempre se acaba
en algún momento,
cualquiera de ellos.

Al salir siempre hay problemas,
cuando no quiero salir
solo me queda pensar
en lo feliz que estaré de regresar,
cuando no puedo salir
solo me queda mirar el techo
y huir por ahí,
pero nunca es así,
nunca es así.

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