viernes, 22 de agosto de 2014

Energúmenos

Tengo todo el derecho,
soy tu pareja, eres mía,
soy el contenedor de tu cariño,
debes contarme todo de ti,
debo acabarte, abarcarte,
no dejar espacio para otros,
el espacio para este amor
solo da cabida a una persona,
y esa persona soy yo,
porque eres mía y te amo,
mía como la guitarra
que dejé apoyada sobre un muro
de mi cuarto un día de verano,
para mirarla, cuidarla y quererla,
siendo el único que puede hacerlo,
nadie más, no hay alguien más,
no puede haber alguien más,
no tienes permiso
si dices que me quieres a mí,
eso de confiar es un lindo discurso,
pero aún no conozco a alguien
que sea capaz de cumplirlo,
mejor desconfiar siempre,
siempre del amor que me nombras,
siempre de tu leve compañía,
de las miradas a la distancia,
de todas y cada una de tus palabras,
porque te amo, me lo merezco,
me tienes que dar todo de ti,
porque dices amarme, ¿cierto?

Sobre las relaciones abiertas
agradezco su libertad y mi tiempo,
sobre la soledad y la calma
agradezco mi intimidad.
sin ello no podría vivir,
si tú no existieses sería aburrido,
pero sobreviviría,
aunque, la verdad sea dicha,
te quiero cerca, solo lo suficiente,
quizá un poco menos,
se puede extrañar y disfrutar
del dulce placer del reencuentro,
mucho más que de la retención,
presidio de otras pasiones,
sin arrepentimientos
y muchas sorpresas.

1 comentario: