martes, 9 de julio de 2013

Las Pastillas del Abuelo

Abuelo,
yo no quiero hablar del pasado,
pero es porque soy egoísta,
olvido que es tu única certeza,
callaré simplemente mis ideas,
sé que ves con ojos tristes lo que viene,
es ese resquicio de temor,
que se ve en tus miradas nerviosas,
en tus temblores,
tienes que anclar la vista en un punto,
para que sigamos conversando,
no eres una foto añeja,
pero te has estancado en sepia,
te has quedado donde sabes todo,
y no olvidas nada,
tan tuyos son estos momentos,
anclas tu seguridad como tu vista,
para no perderte, marearte,
ni una consciencia ajena,
te regalaré un cuaderno,
una libreta y una pluma,
algún lápiz vencerá tus nervios,
mientras escribes lo que dices,
y yo lo atesoro,
como un instante fugaz de despedida,
eres libre ya, libre,
dejando tras de ti esa estela,
eres libre, sí, libre
de despedirte de los sentidos,
y dormir por horas,
para despertar y dormir una eternidad.

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