viernes, 27 de septiembre de 2013

Mutualidad

Dime por favor,
cuándo los silencios se volvieron cómodos,
los vacíos valían por si mismos,
la nada se compartió,
por muy nada que fuese,
las palabras estaban claras,
antes de ser dichas o escritas,
las palabras tenían y no tenían
misterio, suspenso, propiedad,
las palabras eran íntimas,
íntimas conmigo,
pero eres extensible a esa intimidad,
no sé por qué ni con qué pretexto
lograste cambiar todo
sin cambiar nada,
pero todo es tan poco
o casi poco,
hay que cambiar más o menos,
ni yo entiendo,
ni lo intentas, ni lo intento,
no sé si quiera pensarlo así,
solo sigamos lo que pase
y que lo que pase siga
lo que tenga que seguir y pasar.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario